Aquí va la oración, muy útil cuando se pierden los nervios, la fe, la estabilidad, en fin, cuando uno arde de enfado o se desinfla uno. Sirve de autoayuda en general para afrontar lo que nos ocurre en la vida.
Dios, dame la serenidad de aceptar las cosas que no puedo cambiar;
Valor para cambiar las cosas que puedo; y sabiduría para conocer la diferencia.
Esta oración fue creada en 1934 por Reinhold Niebuhr (foto inferior), teólogo y politólogo estadounidense. Desde 1941 con alguna variación es utilizada por Alcohólicos Anónimos.
Suele decirse que lo que más altera la vida de las personas no suele ser lo que les ocurre, sino cómo afrontan lo que les ocurre.
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