Las posibilidades de la música como autoayuda

Estimados lectores,

Para preparar la lectura de este humilde blog, no dejéis de ver este vídeo de youtube donde escucharéis una de las canciones más conocidas del siglo XX, "My way", adaptación realizada por Paul Anka de una canción popular francesa ("Comme d'habitude") popularizada como pocas por Frank Sinatra (foto inferior).

 Una de las más desconocidas historias en torno a esta canción es la trascendencia que ha tenido en la historia (en la caída del comunismo, por ejemplo) y por supuesto, en la psicología de autoayuda.

Curiosamente, el disco, que vió la luz en año 1969, que contenía esta canción no fue un éxito inmediato. Se dice que allá por el año 89, cuando el Comunismo empezaba a debilitarse en la Europa del Este, la doctrina de no intervención propugnada y defendida por Mijail Gorbachov (foto inferior) fue bautizada por él mismo como "Doctrina Sinatra".

Si escuchamos la canción con atención, percibiremos que el cantante realiza una retrospectiva de su vida, de la toma de decisiones, de su actitud ante los éxitos y (más importante aún) ante los fracasos al tiempo del valor que tiene haber seguido un camino propio. Todo ello le confiere a este mítico tema, una esencia de autoayuda concentrada en cuatro minutos y medio de una belleza espectacular.

Os traduzco la canción para su mejor comprensión:

El final ya está aquí y enfrento el último telón. Amigo, lo diré sin vueltas (...). Tuve una vida satisfactoria. Recorrí todos y cada uno de los caminos. Y más, mucho más aún. Lo hice todo a mi manera... Lamentaciones, algunas tuve que no vale la pena comentar(...). Planeé cada etapa programada, cada cuidadoso paso en mi camino (...). Hubo momentos en que dí pasos más largos que mis piernas (...). Afronté los hechos y me mantuve intacto y lo hice todo a mi manera (...). Amé, reí y sufrí. Me tocó ganar, también perder (...). Pues ¿Qué es un hombre?, ¿Qué ha logrado? Si no es fiel a sí mismo, no tiene nada. Decir las cosas que siente realmente y no las palabras del que se arrodilla. Mi historia muestra que asumí los golpes y lo hice todo a mi manera. (Paul Anka).

Varias enseñanzas de la canción:

1) "El final ya está aquí"

El final como un cambio, que no cabe más dramático, nos supone un enorme impacto emocional e igualmente (no deja de ser la otra cara de la moneda) supone la posibilidad de tomar otros rumbos que de otra manera nunca nos hubiéramos planteado.

2) "Recorrí todos los caminos"

El tema de la encrucijada de caminos es uno de los centrales de la canción. El hecho de realizar la elección por nosotros mismos, nos lleva un paso más adelante en nuestro desarrollo personal.

3) "Pasos más largos"

El Ser Humano normalmente busca la seguridad, las razones que nos llevan a apartarnos del riesgo es que resulta cansado, ya que:

- Debemos considerar diferentes opciones.
- Sacrificar las ventajas de unas opciones en favor de las de otra opción.
- Realizar la transición entre un estado mental evaluativo a otro de toma de decisiones.

3) "Amigo, lo diré sin vueltas"

La verdad, dicha abiertamente, puede ocasionar conflicto o tensión, pero las medias verdades o la verdad falseada puede convertirse en la semilla de un confllicto importante. En el contexto liberador de la persona que va a morir y que lo quiere hacer sin remordimientos, lo mejor es hacerlo hacerlo "confesado".

4) "Me tocó ganar, también perder"

Analiza los pros y contras de lo realizado en la vida. A través del relato de lo realizado en la vida se ponen de manifiesto los aciertos y los errores. Las personas que tienen un espíritu más activo, obviamente se equivocan más y, por ello aprenden más, con lo que el balance resulta siempre positivo.

5) "Ser fiel a sí mismo"

Otro de los temas centrales de la canción es la superación de los temores y barreras que nosotros mismos nos ponemos y que por tanto se concrete en la capacidad tomar nuestras propias decisiones con personalidad.

6) "Lo hice todo a mi manera"

Dice un viejo aforismo, "Si te caes, levántate y anda". Lo que nos dice de nuevo esta canción es que no debemos dejar de ser nosotros mismos especialmente cuando nos caemos o equivocamos. Si hemos sabido vivir a nuestra manera, cuando caiga "el último telón" estaremos satisfechos de la obra de nuestra vida.